El narcisista es alguien que vive centrado en sí mismo, buscando constantemente la admiración y validación de los demás. Pero, ¿qué sucede cuando se interrumpe ese flujo de atención y se establece un no contacto? En este artículo, me gustaría ahondar en cómo se siente el narcisista en esta situación, desde mi propia experiencia y conocimiento sobre el tema.
La sensación de abandono
Cuando se establece un no contacto con un narcisista, este puede experimentar una profunda sensación de abandono. Al no recibir la atención y admiración que tanto anhela, el narcisista puede sentirse vacío y desprovisto de su fuente de energía. La falta de contacto puede llevarlo a cuestionar su propio valor y autoestima, lo cual puede desencadenar sentimientos de ansiedad y depresión.
Personalmente, he vivido esta sensación de abandono cuando me he encontrado en situaciones de no contacto con personas que alimentaban mi ego. Sentir que no soy el centro de atención y que mi valía no es reconocida puede resultar abrumador y desestabilizante. Es importante reconocer que esta sensación de abandono es parte del proceso de sanación tanto para el narcisista como para las personas que han sido víctimas de su comportamiento.
La rabia y la frustración
Otro de los sentimientos que puede experimentar un narcisista en un período de no contacto es la rabia y la frustración. Al no poder ejercer su control sobre los demás y manipular las situaciones a su conveniencia, el narcisista puede sentirse impotente y vulnerable. Esta falta de poder puede desencadenar una reacción de ira y resentimiento hacia aquellos que han decidido establecer el no contacto.
En mi caso, he sentido una profunda frustración al no poder influenciar en las decisiones de las personas que me rodean y ver cómo mi influencia disminuye. La sensación de pérdida de poder puede resultar abrumadora y desencadenar respuestas emocionales intensas. Es fundamental aprender a gestionar estas emociones para poder avanzar hacia una relación más sana y equilibrada con los demás.
La necesidad de buscar otra fuente de atención
Ante la falta de contacto con su fuente habitual de admiración, el narcisista puede buscar desesperadamente otra forma de obtener atención y validación. Esto puede manifestarse en comportamientos tales como buscar a nuevas personas dispuestas a satisfacer sus necesidades, o en redoblar esfuerzos para llamar la atención de aquellos que han establecido el no contacto.
En mi experiencia, he sentido la urgencia de encontrar una nueva fuente de admiración que pueda llenar el vacío que se ha formado por la falta de contacto con personas que me alimentaban emocionalmente. Este proceso puede resultar en una búsqueda frenética y desesperada que puede llevar al narcisista a cometer errores y tomar decisiones impulsivas.
La reflexión y la introspección
A pesar de todas las dificultades y emociones intensas que puede experimentar un narcisista en un período de no contacto, esta situación también puede ser una oportunidad para la reflexión y la introspección. Al no tener distracciones externas y al estar privado de su fuente habit
ual de validación, el narcisista puede verse obligado a mirar hacia adentro y cuestionar su propio comportamiento.
En mi caso, he encontrado en el no contacto una oportunidad para reflexionar sobre mis acciones y sus consecuencias en los demás. Este proceso de introspección puede resultar doloroso y desafiante, pero es fundamental para poder iniciar un proceso de sanación y crecimiento personal. Aceptando nuestras vulnerabilidades y defectos, podemos empezar a trabajar en mejorar como personas y en establecer relaciones más sanas y equilibradas.